Fischer vs Petrosian, Buenos Aires 1971
1. e4 c5 2. Cf3 e6 3. d4 cxd4 4. Cxd4 a6 5. Ad3 Cc6
Después de esta partida, Cb8-c6 junto con el siguiente movimiento 6… bxc6 se hizo menos popular. El negro prefiere 5… Cf6, 5… Dc7, o 5… Ac5.
6. Cxc6!
En la Defensa Siciliana, el blanco usualmente se abstiene de este intercambio. Después de bxc6, el negro trae un peón marginal más cerca del centro y también abre la columna b que ayuda a sus planes de atacar en el FD.
Sin embargo, el negro tiene demasiados peones en las casillas claras y también perdió un tempo por a7-a6 comparando con la variante: 4… Cc6 5. Cxc6?! Axc6. El blanco ahora es capaz de explotar su ventaja en el desarrollo mediante la creación de una rápida presión sobre el centro.
6… bxc6
Un poco mejor es: 6… dxc6 intentando conseguir una relativamente simétrica estructura de peones (igual número de peones en ambos flancos). Sin embargo, los movimientos del negro (a6, c6, e6) tienen poco sentido en esta posición. El negro tiene que jugar e6-e5 para desarrollar el Alfil CC. Después de esto, el peón negro e5 se convierte en un blanco fácil para las piezas blancas: 7. Cd2 e5 8. Cc4 Cf6 9. 0-0 Dc7 10. Ad2, amenazando Ad2-a5, el blanco explota la debilidad de las CO en el FD negro; 10… Ag4 11. De1 con la idea f2-f3 y Dg3.
El negro se ve obligado a debilitar su estructura incluso más: 11… b5 12. Ce3 Ac5 13. Cxg4 Cxg4 14. De2 Cf6 15. b4! Seguido por c2-c4, el blanco abre el FD. 15… Ab6 16. c4 Ad4 17. Tac1+- y el ataque blanco en el FD es muy fuerte, [Leko, P. (2701) – Khalifman, A. (2628), 2000].
7. 0-0 d5
Si 7… d6 el negro no reclama nada en el centro, y el blanco tiene manos libres para iniciar un ataque en el FR: 8. Cc3 Cf6 9. f4 Ae7 10. Rh1 Ab7 11. e5 Cd5 12. Ce4 c5 13. exd6 Axd6 14. f5+- [Adams, M. (2716) – Polgar, J. (2677), 1999].
8. c4!
Sin este movimiento, el negro no tiene problemas. El blanco está atacando el centro mientras el Rey negro sigue en el centro, lo cual limita las opciones del negro.
8… Cf6
Si el negro toma uno de los peones blancos, el peón c6 quedará muy débil. Tampoco 8… d4 ayuda en nada al negro por demasiado tiempo: 9. e5 Ce7 10. Cd2 Cg6 11. Cf3 c5 12. Ae4 Ta7 13. b4! Movimiento que demuestra que la estrategia negra no era buena. 13… cxb4 14. Cxd4 Cxe5 15. Af4 Cg6 16. Ae3 Td7 17. Ac6+- [Adams, M. (2755) – Dao Thien Hai (2555), 2000].
9. cxd5 cxd5 10. exd5 exd5
Si 10… Cxd5 11. Ae4 con la amenaza Cc3.
El resultado de la tensión central es que el negro permanece con un peón problemático en d5. El peón es libre pero no tiene suficiente soporte de las piezas negras y por tanto es más bien una debilidad que un activo. El blanco continúa el desarrollo al tiempo que aumenta la presión contra el peón d5:
11. Cc3 Ae7 12. Da4+!
El blanco consiguió bastante ventaja después de la apertura (el peón negro débil d5) como para querer llegar al final, así que propone el intercambio de Damas.
12… Dd7
Después de 12… Ad7 la Dama blanca consigue una excelente posición en el centro: 13. Dd4 Ac6 14. Af4 0-0 15. Tfe1 y el negro es reducido a una total pasividad.
13. Te1!
Forzando al negro a hacer el intercambio en a4, el blanco prepara otro muy importante intercambio: los Alfiles CO.
13… Dxa4 14. Cxa4 Ae6 15. Ae3!
Ahora, se hace evidente la idea de tener el Caballo en a4: el blanco está listo para jugar Ac5.
15… 0-0 16. Ac5!
El negro no tendrá tiempo para avanzar d5-d4, como en posiciones con peón aislado, el jugador que lucha contra él busca intercambiar el Alfil bueno (el que cubre la casilla de delante del PA) del oponente. La diferencia de calidad entre los Alfiles CC es evidente ya que el del negro está limitado por el peón central.
16. Tfe8
Si 16… Axc5 17. Cxc5 con doble ataque en a6 y e6.
17. Axe7 Txe7 18. b4
Un tiro, dos conejos: bloquea el peón negro a6 y obtiene un puesto avanzado para el Caballo en c5. El negro no puede jugar a6-a5 ya que el peón b blanco se volverá realmente peligroso después de b4-b5.
18… Rf8 19. Cc5 Ac8 20. f3 Tea7 21. Te5 Ad7 22. Cxc7+!!
El blanco renuncia a su excelente Caballo por el mucho peor Alfil negro. Sin embargo, el negro estaba amenazando con jugar Ab5 después de lo cual no está claro cómo el blanco podría explotar la sola debilidad de d5.
Después de este intercambio, el negro se ve privado de cualquier oportunidad de contrajuego y la partida se transforma en un puro final donde el blanco ataca 2 debilidades (a6 y d5) y tiene mejor actividad.
22… Txd7 23. Tc1
Las 2 columnas abiertas están controladas por las Torres blancas y el Alfil ataca el peón a6. Las piezas negras están reducidas a la pasividad. Es evidente ahora que el blanco no necesitaba mantener el Cc5.
23… Td6
El negro se ve obligado a renunciar a la séptima fila ya que el blanco amenazaba Tc6.
24. Tc7 Cd7 25. Te2 g6 26. Rf2 h5 27. f4 h4 28. Rf3 f5 29. Re3
Amenazando Rd4, el blanco obliga al negro a avanzar el peón d después de lo cual el Alfil CC conseguirá la diagonal a2-g8.
29… d4+ 30. Rd2 Cb6
Contra Ac4, pero el blanco entra en la séptima fila con la segunda Torre. El negro no podía defenderlo todo.
31. Tee7 Cd5 32. Tf7+ Re8 33. Tb7 Cxb4 34. Ac4 (1-0).
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