Foto del Gran Maestro y Campeón del Mundo de Ajedrez Tigran Petrosian.

Fischer vs Petrosian, Belgrado 1970

Resultado: 1-0    Fecha: 29/03/1970    ECO: B13

1.e4 c6 2.d4 d5 3.exd5 cxd5 4.Ad3

Una vieja, rara y nada pretenciosa variante, aunque se puso de moda a raíz de esta partida. Las blancas quieren jugar tratando de restringir a las fuerzas contrarias.

4… Cc6 5.c3 Cf6 6.Af4

“Desarrollando los alfiles en contradicción con la regla de Lasker, según la cual deberían desarrollarse antes los caballos. Las siguientes alternativas son imprecisas: 6.h3 e5!, o bien 6.Ag5 Ce4! 7.Axe4 dxe4 8.d5 Ce5 9.Da4+ Dd7 10.Dxe4 Df5” (Fischer).

6… Ag4

La respuesta más natural en el espíritu de la Caro-Kann. Después de e7-e6 se crearía una estructura Carlsbad con los colores invertidos. En los años setenta, esta variante fue activamente estudiada en Bakú, donde bajo la influencia del maestro Sajarov todo el mundo jugaba la Defensa Caro-Kann.

7.Db3 Ca5?!

Más tarde, Petrosian lamentaba no haber jugado 7… Db6, de forma análoga a una antigua partida contra Kasparian de 1946, o bien 7… Dc8 y Ah5-g6 (esta idea de Hort también fue aprobada por Fischer). En años posteriores, las negras comenzaron a optar por 7… Dd7 8.Cd2 e6 9.Cgf3 Axf3 10.Cxf3 Ad6! 11.Axd6 Dxd6, sin mayores problemas: 12.0-0 0-0, con igualdad (Lanka-Kaspárov, 1977) o bien 12.Dxb7 Tb8 13.Da6 0-0 14.Ab5 Tb6 15.Da4 Ce7 16.b3 Ce4 17.Tc1 Tc8 18.Ad3 Cg6 19.Ce5 Cc5! (Morozevich-Oll, 1997).

8.Da4+

Es interesante 8… Dc2!?

8… Ad7?

Pero esta jugada tímida, pasiva, seguida del encierro del alfil con e7-e6, no responde en absoluto al espíritu de la Caro-Kann. Lo correcto es 8… Cc6 (Jolmov) y la dama blanca no está mejor en a4 que en d1. Por ejemplo : 9.Cd2 e6 10.Cgf3 Ad6 11.Ce5 0-0 12.Ag3 Dc7!, con igualdad (Müller-Agdestein, 1998).

9.Dc2 e6

Petrosian sugirió 9… a6, con idea de Ab5, pero entonces es bueno 10.a4!

10.Cf3 Db6

Las negras siguen tratando de cambiar su alfil de casillas blancas, aunque hubiera sido más útil proseguir el desarrollo 10… Ae7 11.0-0 0-0.

11.a4!

Una jugada típica de Fischer, muy concreta: los temores acerca de la debilidad de la casilla b3 le resultaban desconocidos al americano. Quizá Petrosian subestimó esta réplica al emprender la maniobra lateral de caballo. Aquí debe haberse puesto un poco nervioso.

11… Tc8

Las negras tenían una difícil elección, puesto que ninguna de las invasiones en b3 habría aliviado sus dificultades: 11… Db3 12.De2! Cc4 (pero no 12… Axa4? 13.Txa4 Dxa4 14.Ab5+ Fischer) 13.Ac1 Tc8 (13… Ad6? 14.a5!, ganando pieza) 14.0-0, o bien 11… Cb3!? (el cambio del caballo justificaría, al menos, las jugadas precedentes) 12.Ta2 Tc8 13.0-0 Ae7 14.Ae5 (14.Te1!?) 14… h6 15.Cbd2 Cxd2 16.Cxd2, etc.

12.Cbd2 Cc6 13.Db1 Ch5

Está claro que las negras han perdido la batalla de la apertura y que el alfil de d7 no es un motivo de orgullo, pero podían haber ofrecido una tenaz defensa, con 13… g6 (Fischer) 14.0-0 Ch5 15.Ag5 Ag7.

14.Ae3 h6?

Entregar la casilla e5 resulta inmediatamente decisivo. También era malo 14… f5?!, porque permite el ataque 15.g4! fxg4 16.Cg5 (Fischer). Muchos comentaristas recomendaron 14… g6, pero después de 15.0-0 y Ce5, o bien 15.Ce5 de inmediato, y si 15… Ad6, entonces 16.f4! Axe5 17.a5! Cxa5 18.fxe5, las blancas habrían conservado la iniciativa.

También se sugirió 14… Ad6 (Suetin), con idea de 15.Axh7 g6 16.Axg6 fxg6 17.Dxg6+ Dd8 18.g4 Ce7. Es cierto que después de 19.Dg5 es malo 19… Rc7?, por 20.c4! (Jolmov) 20… dxc4 21.Tc1! Rd8 22.Ce5 Axe5 23.Dxe5 Th7 24.gxh5, etc., pero con 19… Dxb2 el juego sería de doble filo. Seguramente Fischer habría respondido 15.Ce5!

En el peor de los casos, era posible sacrificar un peón con 14… Dc7!? (impidiendo que el caballo blanco juegue a e5) 15.Axh7 Cf4 16.Axf4 Dxf4 17.Ad3 Ad6, pero eso significaría jugar al estilo de Spassky o de Tal, no al de Petrosian.

15.Ce5! Cf6

“Capitulación efectiva”, escribe Petrosian. “Cuando jugué 11… Tc8, tenía la intención de seguir con 15… Cxe5 16.dxe5 Ac5, con cambio de alfiles y Af4, en conjunción con un posible f7-f6 ó d5-d4, que les habría dado buen juego a las negras. Pero sólo en el último momento vi que la jugada intermedia 17.a5! trastocaría todos mis planes: 17… Dc7 18.g4!, ganando pieza, ya que después de 18… Axe3 a9.fxe3 Dxe5 20.gxh5 Dxe3+ 21.Ae2 Ab5 22.Dd1 y Cf1, las negras no tienen compensación real”. La sugerencia de Fischer, 18.Cf3 Axe3 19.fxe3 también es buena.

Una extraña omisión que da fe de la anodina forma competitiva del excampeón mundial…

16.h3

“Para prevenir un ulterior Cg4 en muchas variantes y tal vez g2-g4, después de que las negras enroquen (Fischer). Las blancas tienen un sólido centro y una fuerte presión. En otras palabras, una posición estratégicamente ganada.

16… Ad6 17.0-0 Rf8?!

“Es mejor 17… 0-0” (Fischer”. “Pero después de 18.f4 no veía cómo podría contrarrestar el ataque con g2-g4” (Petrosian). ¡Se viene a la mente el “Ataque Pillsbury” en el Gambito de Dama!

18.f4 Ae8

18… Cxe5? 19.fxe5 Axe5 20.a5, ganando (Fischer).

19.Af2! Dc7

Si 19… g6, Fischer indicó 20.f5 gxf5 21.Axf5 exf5 22.Dxf5 Dd8(?) 23.Ah4, ganando. Sin embargo, después de 22… Rg7! 23.Ah4 (no es mejor 23.Dxc8 Ce7! 24.Da8 Ad7 25.a5 Da6, ni tampoco 23.Cdc4 dxc4 24.Cxc4 Dd8 25.Cxd6 Ce7!) 23… Axe5 24.Axf6+ Axf6 25.Dxf6+ Rg8 26.Tf4 Th7 27.Tg4+ Rf8 28.Df5 h5! 29.Th4 Dd8!, o bien 29.Tf4 Dc7!, las negras rechazan el ataque.

En mi opinión, es más preciso un sacrificio diferente: 20.Axg6! fxg6 22.Cxg6+. Por ejemplo:

  1. 21… Rg7 22.Cxh8 Rxh8 23.f5 Af4 24.De1! exf5 (mejor que 24… Dxb2 25.Dxe6 Cd7 26.Cf3, o bien 24… Axd2 25.Dxd2 Rh7 26.fxe6 Ce7 27.Ah4 Ce4 28.Df4 Cg6 29.Df5 Cd6 30.Dh5 Dxb2 31.Ag5!) 25.De6! Cd7 26.Cc4!! Dc7 (26… dxc4 27.d5!) 27.Ce3 Dd6 28.Dxd5 Dxd5 29.Cxd5, con un final técnicamente ganado.
  2. 21… Axg6 22.Dxg6 Ae7 (22… Cg8 23.Ah4! Dc7 24.Dxe6 Th7 25.Dxd5, o bien 23… Cce7 24.Axe7+ Axe7 25.f5 Cf6 26.Taee1 Tc6 27.a5! etc) 23.f5! Tg8 (23… exf5 24.Ae3!) 24.Dxh6+ Re8 25.Ah4, con buenas posibilidades de ganar.

20.Ah4 Cg8 21.f5!

Con el rey en f8, la apertura de la columna f es más importante que el puesto avanzado de e5.

21… Cxe5 22.dxe5 Axe5 23.fxe6 Af6 24.exf7 Axf7 25.Cf3! Axh4

Si 25… g5 26.Af2 Rg7, entonces 27.Ad4 (Fischer), o bien 27.Cd4! Ce7 28.Cb5, y las blancas ganan.

26.Cxh4 Cf6 27.Cg6+!

Un toque característico. 27.Cf5! se sugiere por sí solo, pero Bobby no deja escapar la ocasión de cambiar el alfil enemigo (una pieza, el alfil, que tenía en muy alta consideración) para quedar con su favorito alfil contra un caballo.

27… Axg6 28.Axg6 Re7!

Fischer, que ya esperaba la rendición de su rival, le concedió a esta jugada dos signos de admiración. “La única opción de las negras, escribe Petrosian. “Tal vez su rey pueda escapar por las casillas negras del flanco de dama”.

29.Df5 Rd8 30.Tae1 Dc5+ 31.Rh1 Tf8

Ambos jugadores consideraron que era más tenaz 31… Tc6, pero también en este caso, después de 32.Af7 Tc7 (32… Td6 33.c4!) 33.Ae6, las negras no habrían durado mucho.

32.De5!

Esta centralización paraliza a las negras.

32… Tc7

Si 32… Dc7? 33.Dxd5+!

33.b4! Dc6

Si 33… De7 34.Dd4

34.c4!

Una bonita y enérgica conclusión.

34… dxc4 35.Af5 Tff7 36.Td1+ Tfd7 37.Axd7 Txd7 38.Db8+ Re7 39.Tde1+ y las negras se rindieron.

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