Foto del Gran Maestro y Campeón del Mundo de Ajedrez Ruy Lopez De Segura.

Biografía de Ruy Lopez De Segura

Año de nacimiento: 1530    País: España    ELO:

Gran Maestro y Campeón del Mundo de Ajedrez de España

Los padres de Ruy López eran mercaderes acomodados, con casa y escudo en la Plaza Grande de la localidad española de Zafra en la provincia de Badajoz.

Desde joven Ruy López fue un enamorado del ajedrez, y se dice que estudió a fondo el libro publicado en 1512 por Pedro Damiano. Más tarde escribió su Libro de la invención liberal y arte del juego del ajedrez, publicado en Alcalá de Henares en 1561. Ruy López difundió el lance de la captura al paso, al usarlo con frecuencia en sus partidas.

Muchos historiadores del ajedrez lo consideran como el primer campeón del mundo registrado en Europa y como creador de la teoría del ajedrez. También es destacable que practicó con éxito la modalidad del ajedrez a la ciega. El rey Felipe II le colmó de honores por su fama en el ajedrez.

Se le considera como el mejor ajedrecista de Europa de 1560 a 1565.

En 1565, Felipe II invitó a un torneo en su corte y así se reunieron en El Escorial los dos mejores ajedrecistas italianos de esa época: Leonardo da Cutri y Paolo Boi, junto con los españoles Ruy López y Alfonso Cerón, de Granada.

Esta prueba es calificada por los historiadores como el primer Torneo Internacional de Maestros y la primera en ser documentada.

La parroquia de Nuestra Señora de la Candelaria de Zafra comenzó sus registros de nacimientos en 1534, donde aparecen varios hermanos López de Segura, hijos de Hernán López y María López, que nacieron con posterioridad a esta fecha: Ruy hacia 1530. Que era nacido en Zafra no ofrece duda, ya que él mismo lo confirma en dos ocasiones: primero en su tratado de ajedrez en 1561, donde se declara “vezino de la villa Çafra”, y luego en Sevilla en 1570, donde se inscribe como “natural de la villa de Çafra”.

La única noticia que se tiene de la niñez de Ruy la proporciona Sebastián de Covarrubias en su Tesoro de la lengua castellana o española (1611), que en la voz “Çafra” dice así: “Otra Çafra hay en Extremadura, donde hubo un muchacho, que siendo de muy poca edad, era tan gran jugador de ajedrez, que todos le reconocían la ventaja, y quedó el nombre del niño de Çafra”. Como Covarrubias le llama “muchacho”, es decir, un joven entre siete y catorce años, pero de “muy poca edad”, suponer que tenía unos diez años parece adecuado.

A partir de este momento las noticias sobre su vida proceden o se pueden deducir de sus dos obras publicadas: el Libro de la invención liberal y arte del juego del ajedrez, en Alcalá en 1561, y la Gramaticæ institutiones en Lisboa en 1563.

Se le declara clérigo, lo cual implica que había estudiado Humanidades y obtenido las órdenes mayores eclesiásticas. También había estado al servicio de García de Toledo, ayo y mayordomo mayor del príncipe Carlos. Ello le permite dedicar su Libro del ajedrez a García de Toledo para que lo hiciese llegar al príncipe, quien, según dice, “parecía holgarse de saberlo y verlo jugar”.

Por entonces vivía en Alcalá, lugar en que se imprimió el libro. En el capítulo VI de la tercera parte informa de su viaje a Roma y de unas partidas que allí jugó:

Ninguna cosa de aquestas tocó Damian, siendo juego que lo hacen algunos jugadores, principalmente con los que no saben mucho y aun conmigo mesmo lo jugó, algunas veces, un estremado jugador que se hazía llamar el muchacho de Roma. Y esto, estando en Roma, al principio del pontificado del papa Pío 4, en el año de 1560.

Por otra parte, el “estremado jugador que se hazía llamar el ‘muchacho de Roma’” era Giovanni Leonardo da Cutro. Como las partidas jugadas con el fueron al menos dos, hay que anotar esas victorias en la cuenta de Ruy López.

El Libro de la invención liberal y arte del juego del ajedrez de López está dividido en cuatro partes:

  • Primera Parte, folios 1r. a 70v. Dividido en veintisiete capítulos: I-II, justificación de las cualidades del juego; IIIV, sobre la invención del juego; VI-XXIV, sobre las características del tablero y las piezas, su significado, posición y movimientos de las piezas; XXV, sobre el jaque y el mate; XXVI, justifica cómo colocar el tablero; XXVII, indica una nomenclatura para las casas del tablero y cómo colocar las piezas, siguen los treinta y seis advertimientos o reglas generales, luego las diecisiete leyes del juego; finaliza con una introducción a los modos de ordenar los juegos que ocupan las tres partes siguientes.
  • Segunda Parte, folios 71r.-96r. Dividida en veintinueve capítulos, dedicados a aperturas nuevas jugando al par: 12 a aperturas con el peón de rey; 16 al gambito de rey; 1 al gambito de dama.
  • Tercera Parte, folios 96r.-126r. Dividida en veinticuatro capítulos, dedicados a aperturas del repertorio habitual jugando al par: 21 a aperturas con el peón de rey; 2 al gambito de dama; 1 a diversas aperturas.
  • Cuarta parte, folios 126r.-150r. Dividida en quince capítulos, dedicados a aperturas para cuando se juega dando ventaja.

El Libro del ajedrez abrió la puerta al ajedrez moderno y utilizó el método de análisis de aperturas que ha perdurado hasta nuestros días. Se utilizaron copias manuscritas en Italia y luego se tradujo e imprimió en italiano, alemán, francés, inglés, ruso y otras lenguas, realizándose numerosas ediciones y reimpresiones hasta mediados del siglo XVIII.

La siguiente referencia que se tiene sobre este ajedrecista es en 1570 en Sevilla, en las listas de inscripción para emprender viaje al Nuevo Mundo:

N.º 89. El Bachiller Rui López de Segura, clérigo, natural de la villa de Zafra, hijo de Hernán López de Segura y de María López de Segura, su mujer, se despachó a las provincias de Perú por cédula de su […] en —12 de octubre.

Y en el margen la nota: “cualquier navío”, lo cual indica que viajaba solo y que deseaba partir cuanto antes. Su hermano Alonso figura inscrito como comerciante para viajar a Perú el 13 de marzo de 1564, por lo que pudiera haber sido su llamada la que animase a Ruy a emprender el viaje. Como en octubre de 1570, cuando se inscribió, ya había partido la Armada hacia el Nuevo Mundo, había que esperar hasta el próximo año, pero en 1571 no pudo formarse la Armada para el viaje ya que todos los navíos habían sido requisados para la flota cristiana de la Santa Liga contra el turco. Así que hubo de esperar hasta la Armada de 1572 para iniciar su viaje al Nuevo Mundo. Ello permite conjeturar que hasta principios del año 1573 no estuvo instalado en Perú. En esos casi dos años que permaneció en Sevilla hasta iniciar su viaje, le visitaron los jugadores italianos Giovanni Leonardo da Cutro, Giulio Cesare Polerio l’Abruzzese y Paolo Boi. Gracias a las notas que tomó Polerio, que viajaba acompañando a Cutro, en sus cuadernos de ajedrez, han llegado cuatro de las partidas que allí se jugaron. Tres de ellas contra Leonardo, con el resultado de una victoria y dos tablas a favor de López; una contra Paolo, con victoria de López.

A partir de este momento no se vuelven a tener noticias de Ruy López de Segura. Su hermano Alonso volvió a Zafra hacia 1590 y falleció en Zafra. Como no dejó ni una sola palabra sobre su hermano y no le nombra en su testamento, hay que suponer que Ruy había fallecido en Perú poco antes de 1590.

La huella de la estancia de Ruy López en Perú la proporciona casi tres siglos después Ricardo Palma (1833-1920) en sus Tradiciones peruanas, décima serie, en el apartado titulado “Atahualpa”. Tras justificar la afición de los españoles por la influencia islámica en su cultura, dice así:

Pronto dejó de ser el ajedrez el juego favorito y exclusivo de los hombres de guerra, pues cundió entre las gentes de Iglesia: abades, obispos, canónigos y frailes de campanillas. El primer libro que sobre ajedrez se imprimiera en España apareció en el primer cuarto de siglo posterior a la conquista del Perú, con el título de Invención liberal y arte axedrez, por Ruy López de Segura, clérigo, vecino de la villa [de] Zafra y se imprimió en Alcalá de Henares en 1561. Ruy López quien estuvo en Lima, es considerado como fundador de teorías, y a poco de su aparición se tradujo el opúsculo al francés y al italiano.

El librito abundó en Lima hasta 1845, poco más o menos, en que aparecieron ejemplares del Philidor. Esta noticia de Palma permite evocar al clérigo de Zafra con su paquete de libros de ajedrez en los muelles de Sevilla para iniciar su viaje al Nuevo Mundo, navegando por el mar Atlanticus, cruzando el istmo de Panamá y, finalmente, navegando por el mar del Sur o Pacificum hasta Lima.

Una bella estampa ajedrecística sin duda.

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